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Nuestras raíces se remontan al año 1979 cuando Núria Raja abrió la Carpeta, Una papelería convencional de barrio, cercana y muy singular.
Con el paso del tiempo, en el año 1986 se decidió abrir RAIMA. Ubicada en la misma calle Condal que la primera y situada en un emblemático edificio del año 1513. Así nació RAIMA, con un estilo marcadamente personal y con el propósito de ser el hogar de una selección de productos excepcionales, basados en la calidad y la funcionalidad y por supuesto. Sin embargo lo que hacía única esta tienda desde el día que abrió y hasta ahora, es su capacidad de ofrecer la más extensa y diversa gama de papel los profesionales del mundo del Diseño, la Arquitectura y las Bellas Artes.
Es así como se concedió en Barcelona un espacio donde se podían despertar emociones a partir de un producto tan delicado ii versátil como el papel. Un lugar donde se podía conseguir todo el abastecimiento necesario para crear, decorar y construir todo lo que la imaginación nos permita.
Es gracias a nuestro esfuerzo, pasión y dedicación que hoy día somos reconocidos como una papelería de referencia y es que desde el primer momento se construyó escalón tras escalón con el objetivo de dar vida a cómodos espacios, donde convergen muebles restaurados de la época con un compendio de productos auténticos, traídos de todo el mundo y capaces de crear una atmósfera de armonía y equilibrio, que juega con la identidad del edificio y permite una intervención no agresiva y respetuosa. Sabíamos desde el principio que la luz tenía un papel muy importante y por sí sola tiene la habilidad de otorgar espíritu a los entornos y colores de cada planta, por lo que aprovechamos el amplio lucernario (Patio) que se encuentra en el centro de la tienda y baja desde el último hasta el primer nivel para dar una sensación de verticalidad y amplitud muy auténtica y envolvente en toda la tienda.
Finalmente, para complementar esta singular infraestructura, dispusimos los productos con un equilibrio cromático muy característico y se los clasificamos por plantas con ambientes claramente definidos, diferentes pero complementarios todos ellos.
Y es que tras la ampliación de la tienda donde pasamos de 2 a 6 plantas, cada nivel busca transmitir una emoción y una sensación de vívida calidez para así encontrar una conexión con los colores y tonalidades de la temporada en función de los servicios, marcas y artículos que allí reposan.